Se acabó el lenguaje "economicamente correcto", lo he dicho en una entrada anterior: los Mercados andan "creciditos" ante la "bajada de pantalones" de los Gobiernos, y ya no se molestan en disimular.
Esta es la autentica cara (dura) del Capitalismo. Olvidemonos de eso tan "bonito" de crear riqueza "para todos", de "rememos todos en la misma dirección", de "si no nos apretamos el cinturón (los de abajo), no saldremos de esta (los de arriba)", de "esto se arreglará con un cambio de gobierno que dé confianza a los Mercados", etc.
El Capitalismo tiene sus propias reglas: NO HAY REGLAS, el pez grande se come al chico, primero YO y después...YO.
Así que no caigamos en su trampa, en el tiempo de las Vacas Gordas, no repartieron los beneficios, ahora, que no nos quieran hacer pagar sus...¿pérdidas?
¿Que pasaría si un obrero despedido, sin subsidio y desahuciado de su casa por no pagar la Hipoteca saliera en la tele diciendo: "Me alegro mucho de la Recesión, me dan calambres de placer cuando veo cerrar empresas, proletarizarse a la pequeña burguesía y espero que un día los RICOS DE VERDAD empiecen a tirarse desde los Rascacielos después de haberlo perdido TODO y que a los trabajadores les quiten todos los derechos, para que, cuando no tengan NADA QUE PERDER, salgan a la calle y DERRIBEN este PUTO SISTEMA DE MIERDA"?
¡Nuestros sueños son sus pesadillas!
Kamarada Paulov